Píldoras de Historia

Uso recreativo de las raquetas de nieve

27/02/2018

Vimos ayer los precedentes de las raquetas de nieve, elaborados fundamentalmente a base de madera y su uso, tanto en cacerías como para moverse sobre la nieve en general. Desde hace mucho tiempo también tienen otro uso, el recreativo.

Hay quien remonta este uso recreativo al siglo XIX en Canadá, donde los Clubs de Raquetas, inicialmente creados por razones de entrenamiento militar, serían los primeros en darlas, con el paso del tiempo, un uso de ocio. Así, en Quebec se celebraron «eventos donde las carreras y las caminatas se combinaron con alimentos refinados y bebidas» (Ver).

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Es probable, sin embargo, que en todas partes donde cae nieve con relativa abundancia haya habido quien haya querido disfrutar de ella mediante paseos con los antecedentes de las raquetas, barajones incluidos. De hecho, si buscamos en la prensa encontramos ejemplos desde bien pronto en la misma Cantabria. Por ejemplo, el 1 de febrero de 1914 El Cantábrico, en crónica desde Reinosa, señalaba que hacía pocos días «salió de la villa una caravana, en marcha simpática, a realizar una excursión. Iban provistos de barajones, que les permitían a los excursionistas subir con facilidad las pendientes, y además les impedía hundirse. Formaban la alegre expedición unos cuantos jóvenes que han comprendido el encanto de estas marchas por el campo». El grupo, del que formaban parte tanto chicas como chicos, subió desde la aldea de Fresno a la Peña de la Milana. Esta ruta se repetía por aquellos años todos los inviernos.

Otro ejemplo es del 21 de enero de 1917 cuando el periódico santanderino La Atalaya publicaba esta información de su corresponsal en Reinosa:

«Antes de que el viento, que deshizo la mayor parte de la nevada que hace días nos cubrió con una capa de setenta y cinco centímetros lo hiciera desaparecer completamente, han vuelto a caer algunos copos, y sucediéndose unas heladas tan intensas que la nieve se ha petrificado, formando una superficie durísima que la vigorosa juventud aprovecha para ejercitarse haciendo expediciones sobre barajones (skis españoles), y deslizándose vertiginosamente por las cuestas con trineos y toboganes, en medio de un ambiente y panorama ideales de cielo azul y montañas blancas».

En Campoo, de donde son estos ejemplos, se consolidó el deporte invernal con la fundación en 1932 del Club Pico Tres Mares.

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Ya en 1902 el escritor campurriano Demetrio Duque y Merino comparó los barajones con los esquíes de noruegos, suecos y daneses, tras haber publicado la revista "Alrededor del Mundo" que en Noruega se celebraban carreras de esquíes y de saltos. Consideraba el campurriano que con los barajones «no pueden hacerse las rápidas carreras que se hacen con aquellos; ni en manera alguna están dispuestos para los saltos de 25 y 36 metros» pero para prestar servicio en las regiones montañosas eran tan eficientes como ellos.

En 1936 en El Cantábrico volvían a comparar los esquíes con los barajones, incidiendo en que mientras los primeros requieren de sitios especiales «el ski escocés o barajón se puede emplear para andar sobre la nieve por todos los sitios, incluso cuando está blanda, recién caída y por cualquier sitio de nuestras montañas», caminando «a paso normal, sin hundirse en la nieve».

Faltaban aún unos cuantos años para que se produjera una auténtica revolución en el mundo de las raquetas de nieve/barajones. Fue en la década de los 1980, cuando se difundió el uso en su elaboración del aluminio y el acero, y, posteriormente, han experimentado un rediseño total, elaborándose con una sola pieza de plástico. Todo ello ha contribuido a reducir su peso y a divulgar su uso como ocio en una sociedad también más orientada al aprovechamiento del tiempo libre. En un primer momento fueron montañeros quienes comenzaron a utilizarlas en las aproximaciones a las peñas que iban a escalar. Estos últimos años, sin embargo, se ha extendido considerablemente su uso entre amplios sectores de la sociedad que las ven como un medio relativamente fácil de practicar deporte en invierno en contacto con la naturaleza. Con el aumento de practicantes, llegó también su empleo en competiciones que veremos mañana.


Ver Raquetas de nieve I

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Ver Raquetas de nieve IV

Ver Raquetas de nieve V


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