12/03/2016

En el Centro de Estudios Lebaniegos, donde se concentró numeroso público entre el que se encontraba sus familiares más cercanos y amigos, que quisieron así demostrar su cariño a la nueva Mujer del Año de Liébana y Peñarrubia, Emilia Salceda, se celebró un merecido homenaje a esta mujer que como muchas otras de su época con su trabajo y su actitud, han colaborado a conformar una sociedad próspera en valores, que la diferencia de las demás.

En el acto estuvieron presentes la Directora General de la Mujer del Gobierno de Cantabria Alicia Renedo, Beatriz Fernández, Directora General de Ganadería, Eva Cotera, Teniente de Alcalde y Concejala de Educación y Cultura del Ayuntamiento de Potes quien ofició de maestra de ceremonias y la presencia de los alcaldes de los municipios de la Mancomunidad de Liébana y Peñarrubia: Cillorigo de Liébana, Potes, Vega de Liébana, Peñarrubia, Camaleño y Cabezón de Liébana.

La Mancomunidad es la institución instauradora por segunda vez de esta distinción.

Emilia Salceda fue propuesta por iniciativa de la Asociación de Empresarios del Valle de Liébana, AEVAL, quien valoró la trayectoria a lo largo de estos años de vida de la protagonista. Nacida en la localidad de Las Ilces, Camaleño, en marzo de 1929 en el seno de una familia de labradores, trabajó desde muy pequeña en las labores del campo junto a sus padres y dos hermanos. En 1944, y no sin esfuerzos familiares, se matriculó en el Instituto Santa Clara de la capital cántabra, donde cursó estudios de bachillerato. Tuvo que volver a casa a "echar una mano" ya que sus hermanos emigraron hasta Cuba y en 1954 contrajo matrimonio con Máximo Cuesta, del que nacieron cinco hijos. A los nueve años de casados, y con gran esfuerzo, reunieron las 450.000 pesetas que costó por entonces la "Fonda Máximo" en Espinama y, hoy, a sus 87 años, Emilia sigue trabajando en la misma como una más. Su vida la han marcado sin duda alguna tres tristes episodios como son la pérdida de su casa natal, el fallecimiento de su esposo y el de un hijo a una edad temprana.

En el capítulo de intervenciones, Eva Cotera agradeció a todos la presencia y recalcó "la importante labor desempeñada por las mujeres de nuestros pueblos en distintos ámbitos de la vida, mujeres que a lo largo de su vida han tenido una doble responsabilidad, familiar y laboral, que en muchas ocasiones han estado ligadas a un sector tan fundamental en nuestra economía como son el turismo y la hostelería". Destacó así mismo "lo dificil que el jurado lo ha tenido para llegar a la elección, ya que todas las designadas por Ayuntamientos o asociaciones merecían con creces la distinción y el homenaje".

Después, Julio Cires, Presidente de la Mancomunidad, volvió a reincidir en los méritos de "estas mujeres que han sido capaces de conciliar sus vidas familiares y laborales, siendo Emilia hoy la que representa a todas ellas que son muchas".

Alicia Renedo agradeció "la deferencia de la Mancomunidad por la invitación al acto en el que se homenajea a una mujer, que, como muchas otras, encarna el esfuerzo, la disponibilidad, el trabajo y el sacrificio en los distintos ámbitos y épocas, y que, a pesar de pequeñas y grandes derrotas, se aferraron con entereza a un sueño”" Para proseguir diciendo que “"todas y cada una de vosotras, de manera individual y también, a veces sin saberlo, colectiva, habéis contribuido al sustento de la economía regional".

Emilia recibió una placa y un ramo de flores por parte de la Mancomunidad, uniéndose al homenaje en forma de otro ramo la Asociación de Mujeres y la de Hostelería, del Valle de Camaleño.

Cerraron el acto la intervención del folclore comarcal a cargo del grupo L’Escañetu y la lectura de una poesía de Soco Sandi en la que se ensalza a la mujer trabajadora lebaniega.

Las últimas palabras, pocas al ser presa de la emoción, las dijo la homenajeada, quien tan solo acertó a decir en varias ocasiones el "agradecimiento a todos por esta distinción que seguramente otras muchas mujeres de Liébana y Peñarrubia la merecerían más que yo".

Informa Pepe Redondo.

Fotos de VL y Pepe Redondo. Más fotos.

Compartir en