05/04/2016

La Decisión del Gobierno de Cantabria de considerar al lobo como especie no cinegética, es decir, que no se pueda abatir en las monterías bajo multa de 10.000 euros, ha tenido una inmediata respuesta con la aparición de múltiples pintadas en el Desfiladero de la Hermida en el firme de la carretera, en muros y rocas, e incluso alguna pancarta alusiva de forma especial al Consejero de Medio Rural, Pesca y Alimentación, Jesús Oria.

Dicha decisión, tomada en la Mesa del Lobo que trató recientemente el Plan de Gestión de esta especie, contó con la aquiescencia de la gran mayoría de los representantes de las asociaciones integradas en la misma, por lo que el paso inmediato, tras su presentación en el Parlamento de Cantabria, será su sometimiento a información pública.

En el parlamento, todos los grupos, con la excepción del Partido Popular, apoyaron el contenido del Plan. Esta decisión se justifica en el sentido de que esto, sería la única manera de que el Gobierno de Cantabria pueda hacerse cargo en lo sucesivo de las indemnizaciones a las que hubiera lugar, por los daños causados por el ataque del cánido a las ganaderías, cosa que en estos momentos no es así ya que solamente se abonan en los territorios en los que el Gobierno gestiona el aprovechamiento cinegético, es decir, en la Reserva Regional de Caza Saja y en el coto Regional de Caza de Valderredible. A partir de la puesta en marcha del Plan, también el resto de cotos entrarían en dicha dinámica de cobro.

Esta noticia ha causado malestar en la comarca de Liébana dentro del sector ganadero, especialmente “castigado” por las numerosas bajas de cabezas de ganado de todo tipo sufridas a lo largo de cada año.

En la Feria de la Caza, celebrada este fin de semana en Potes, se podían oir comentarios en corrillos sobre todo lo expuesto, pero en ningún momento hubo ningún tipo de demostración para demostrar ese malestar latente, ni el sábado que estuvo presente el consejero Oria, ni tampoco el domingo. Sin embargo, el Desfiladero de la Hermida se encuentra en estos momentos invadido de frases alusivas al problema, con protagonismo en algunas de ellas para Jesús Oria.

Consultados algunos de los alcaldes lebaniegos, Javier Gómez, de Potes, manifestó que "no las he visto aunque me han llegado noticias de su existencia. En mi opinión, si esas pintadas “cantan” mucho en lo que se refiere al paisaje o son insultantes hacia cualquier persona, las condeno. No es admisible esa manera de proceder, son actitudes no deseables, injustificables y muy alejadas de la forma de hacer que dicta el sentido común".

Por su parte, Jesús María Cuevas condenaba así mismo las pintadas al considerar que "no es el lugar el Desfiladero de la Hermida para realizar manifestaciones de este modo por ser un icono paisajístico que debemos cuidar, a la vez que recuerdo que el Ayuntamiento de Cillorigo de Liébana que presido, aprobó recientemente en un pleno una moción en la que se consideraba al lobo como especie cinegética, es decir, que estamos con los sectores afectados para que el lobo sea controlado de esta manera con el fin de evitar los grandes daños que producen en los rebaños de los ganaderos de esta comarca".

Otros regidores han preferido permanecer a la expectativa, aunque todos ellos han coincidido en la condena "por el modo de llevar a cabo las protestas con pintadas en un lugar tan emblemático como es el Desfiladero y por las alusiones a personas en los términos tan injustificables como los que se han hecho".

Informa Pepe Redondo.

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